HOMENAJE A CARBONELL ( 1954 )

LITRI Y POSADA, TRIUNFADORES 

Por Vicente Parra.

El taurinismo onubense reaccionó con rapidez ante la tragedia que había supuesto la cogida mortal de Rafael Carbonell.
 Muy pronto se organizó un festival benéfico con el fin de recaudar fondos con destino a la familia, como ya había sucedido con otros espectáculos y con la colecta llevada a cabo y que, afortunadamente, habían encontrado generosas respuestas por parte no solo de los onubenses sino también de muchas otras personas que quisieron unirse a la tragedia sufrida por esta familia choquera.

Y en la tarde del 18 de julio de 1954 se celebró el magno festival con el que el taurinismo onubense, además de ofrecer su ayuda económica, quiso homenajear al joven novillero trágicamente desaparecido un mes antes.
 Hubo numerosos ofrecimientos de toreros por lo que los organizadores tuvieron que sortear los escollos de la fecha, en plena temporada taurina, para componer un cartel atractivo y con garra para que los tendidos se cubriesen.
 Así, los matadores Juan de Dios Pareja-Obregón, Miguel Báez Litri, Juan Barranco Posada y César Girón, así como los novilleros Manuel Franco Cardeño y Alejandro Arnó el venezolano hicieron el paseíllo para lidiar reses de los hermanos Pareja-Obregón, Antonio Urquijo, Diego Garrido, Salvador Guardiola, Tomás Prieto de la Cal y Gerardo Ortega.

Juan de Dios Pareja-Obregón llevó a cabo una faena por el pitón derecho demostrando sus cualidades y, tras un pinchazo y una buena estocada, cortó las dos primeras orejas de la tarde. 

Por su parte, el venezolano César Girón, que dejó de torear en Nimes para intervenir en este festejo, se lució tanto con el capote como con las banderillas para superarse con la variada faena de muleta en la que predominaron vistosos y espectaculares pases. Cortó los máximos trofeos y paseó el anillo con sus compañeros de cartel a los que había brindado su actuación.

Dos orejas cortó Cardeño gracias a la voluntad y al valor puesto durante su actuación mientras que Alejandro Arnó demostró que aún no esta placeado y sus buenos deseos no tuvieron reflejo en su quehacer.

Litri se lució al lucir con verónicas a su oponente. Pese a las dificultades que puso el toro de Urquijo, el onubense dio muestra de una gran serenidad y firmeza en una faena soberana, ajustada, con mando y quietud, llevando a su oponente embebido en los pliegues de la muleta. Lección magistral del torero onubense que concluyó con sus clásicos adornos y desplantes mirando al tendido para matar al toro de una gran estocada. Las dos orejas, el rabo y dos patas fueron el premio obtenido por el choquero en esta tarde triunfal.

Por su parte, Juanito Posada también consiguió un triunfo importante ante el bravo y noble novillo de Diego Garrido. Ovacionado desde que se abrió de capa, el choquero se lució en una faena completísima con primorosos derechazos y naturales de hondo sabor. Un quehacer lleno de ritmo, armonía, gracia y maestría, por lo que tras un pinchazo y una estocada, el público le premió con las dos orejas, el rabo y una pata de su oponente.

En suma, que, además de los objetivos económicos perseguidos, el festival dejó momentos muy interesantes para el disfrute de los espectadores que siempre tuvieron presente la figura del homenajeado Rafael Carbonell.

VICENTE PARRA ROLDÁN