martes, 2 de marzo de 2021

OLVIDADOS POR MOTIVOS POLÍTICOS

 




Más de noventa años lleva en la familia Domecq el emblemático hierro del 
duque de Veragua. Con una antigüedad que se remonta a finales del siglo XVIII, los toros del duque siempre fueron los preferidos de las figuras de todas las épocas del toreo. 

Actualmente, el cuarto Juan Pedro Domecq sigue criando los preferidos por los ases de la tauromaquia. Juan Pedro Domecq Morenés (Jerez de la Frontera, Cádiz, 1968) es uno de los criadores de toros más prestigiosos en la cabaña brava. Actualmente, además, ejerce como Vicepresidente de la Unión de Criadores de Toros de Lidia (UCTL) y junto con su Presidente, Antonio Bañuelos, se reunió con el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas. En el programa Es Toros de esRadio, el ganadero andaluz aseguró que "hay una predisposición del ministro que, eliminando el motivo ideológico, representa a todos los ganaderos y agricultores españoles". Las palabras de Planas fueron "reconfortantes".


"Yo le insistí en que esta es la ganadería extensiva, en términos económicos, más importante de España y que el apelativo de lidia deben olvidarlo desde un punto de vista político" contó el ganadero que espera que esas "palabras de ánimo" del titular de Agricultura, Pesca y Alimentación "no se queden sólo en palabras". Sin embargo, pese a los buenos gestos de Luis Planas o de otros ministros taurinos como Carmen Calvo o José Luis Ábalos, Juan Pedro no tiene la mejor opinión del Ejecutivo que comanda Pedro Sánchez. El criador de toros bravos cree que "este Gobierno nos ha estado maltratando a todos los ganaderos y a toda la tauromaquia en general por motivos exclusivamente políticos". Para el ganadero "eso es una tristeza" y explicó que "la tauromaquia es la expresión artística y cultural más importante de este país y eso lo han obviado simplemente por motivos políticos". 

Sobre el momento que vive el mundo del toro el ganadero dijo que "tristemente es muy difícil ser optimista". "No son momentos óptimos y mantener la ilusión cuando te estás jugando tu patrimonio es tremendamente difícil. Ahora mismo nos lo estamos jugando de verdad y lo estamos perdiendo", señaló Juan Pedro Domecq. 

"Ser ganadero es una quimera absoluta y esperemos que seamos capaces de aguantar", añadió. Domecq destacó que esa es "la realidad" del campo bravo español aunque le gustaría que "fuera otra". "No sólo por lidiar sino cómo se lidia y a qué precios uno es capaz de conseguir vender sus toros. Hay un grandioso problema porque hay un excedente en el mercado terrible y hasta que haya una adaptación de oferta y demanda los precios no se acomodarán", explicó. Por este motivo el criador de toros aseguró que "sin duda el gran damnificado es el ganadero". "Tiene un producto que es perecedero, hay que pagar sueldos y alimentar toros todos los días", dijo. Estos "costes fijos que el torero o el empresario no tienen los tiene que asumir el ganadero".




 "En el estamento taurino nadie tiene duda de que el que está sufriendo de una forma dramática es el ganadero, yo lo que creo es que hay un riesgo de que se pierda una genética insustituible y al final corremos el riesgo de que la tauromaquia desaparezca por falta de materia prima, ese riesgo existe", advirtió. Juan Pedro Domecq cree que es "lo más dramático: si yo estoy sufriendo imagínese todos los demás ganaderos". Pese a todo el criador de toros bravos mantiene una pequeña ventana de esperanza que es "que se ponga la rueda en movimiento". El ganadero cree que "es fundamental" que se empiecen a dar festejos taurinos. "Con la rueda ya nos iremos adaptando, se harán esfuerzos, cada uno lo que pueda, pero volverá a hablarse de toros y la afición, que es la base de este espectáculo, volverá a ir a las plazas en la medida que nos dejen", indicó. También pidió que "esta maldita pandemia se acabe y que podamos disfrutar todos los que nos apasiona la tauromaquia de ella y nos podamos agarrar a un futuro ilusionante".







Sobre la eliminación del segundo hierro de la casa, Parladé, el ganadero dijo que "ahora mismo es un hierro que no hierra, es un hierro vacío". Juan Pedro Domecq señaló que "es imposible y en estos tiempos" y que fue una "bendita decisión". "No se pueden tener dos ganaderías cuando encima estoy recortando ampliamente mi ganadería principal. Hay que adaptarse a los tiempos que a uno le toca vivir y no vivir de los sueños porque uno quebraría y entonces no habría ni ganadería", sentenció.


No hay comentarios:

Publicar un comentario