La plaza de Valencia guardó un impresionante minuto de silencio en homenaje a las víctimas de los atentados del 11M al cumplirse diez años de aquel horror. El toreo, y en concreto los aficionados, no han querido pasar esta fecha sin unirse al resto de España en el recuerdo doloroso de quienes sufrieron la barbarie terrorista.
Y del silencio respetuoso a la pelea de tres muchachos que quieren abrirse camino.
Enfrente una blandita pero nobilísima novillada de César Rincón (El Torreón), tan buena que pedía un toreo de seda.
Y miren por donde ha sido el debutante, un muchacho de El Puig y de nombre Cristian Climent el que ha toreado más reposado, con más hondura y más cabeza, especialmente en el tercer novillo, aunque la oreja se la cortó al sexto, el más rajado de la tarde.
En muchos momentos se relajó con gusto exquisito y sembró la ilusión entre sus paisanos.
Decepcionó Posada de Maravilla, desconocido en su primero, muy ramplón y trapacero.
Solo al final de su faena al cuarto nos recordó al muletero que entusiasmó el año pasado.
Dos series de naturales le salieron de ensueño.
Solo al final de su faena al cuarto nos recordó al muletero que entusiasmó el año pasado.
Dos series de naturales le salieron de ensueño.
Álvaro Lorenzo tiene el sello de los buenos muleteros castellanos y así lo confirmó en el tercero. El quinto se apagó muy pronto
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