La de Jandilla, un peñazo de corrida y muy firme actuación de Adame
Un entradón, rozando el lleno total, porque lo de Fandiño del martes ha impresionado una vez que se ha visto repetidamente en las televisiones.
Y es que la gente, cuando en el toreo las cosas se salen de la rutina y la vulgaridad, admira el gesto sobrevenido en un momento de entrega total de un torero.
Por eso muchos querían ver de nuevo a Iván Fandiño, pensando que tal vez quiera repetir la suerte de matar sin muleta. Pero no había magia, ni gestas. Tocaba el pegar pases a una corrida áspera y deslucida.
El propio Fandiño se empeñó tercamente en alargar la faena al segundo, un toro inválido y a la defensiva. Y por poco no le cuesta un disgusto al torero su absurdo empecinamiento pues fue volteado en un derrote.
El decorado cambió algo en el cuarto, que metió la cara por ambos pitones, aunque El Fandi, que ya no está para un solo lujo, lo trasteó con algún muletazo aislado y lo mató de un espadazo.
El quinto, un toro inflado, aunque apuntando cierta distracción, se empleó con más movilidad que clase y Fandiño en la segunda parte de la faena logró por ámbos pitones los mejores muletazos de la tarde, con un final emotivo por manoletinas. El toro tardó en doblar y adiós a la orejita.
Adame ha estado muy por encima de su lote, y le ha echado a su labor tanto corazón como cabeza
Madrid, viernes 16 de mayo de 2014. Toros de Jandilla y Vegahermosa (4º y 6º), bien pero desigualmente presentados, nobles en distintos grados pero sin finales. El mejor el 5º, un buen toro. El Fandi: Silencio y silencio; Iván Fandiño: Silencio y ovación con saludos tras aviso; Joselito Adame: Ovación con saludos y silencio. Entrada: Casi lleno.
Antes de iniciarse el festejo se guardó un minuto de silencio en memoria de Joselito el Gallo en el 94 aniversario de su fallecimiento..
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