SANFERMINES .

el cartel de la ilusión.

Posada, Varea y Roca Rey

La crisis de aficionados por esta tierra se nota en la entrada de ayer. Mucha gente, que había sacado su abono para San Fermín, ha preferido despreciar la novillada que abre la feria y perder las localidades.

El abono, desde luego, está vendido casi al 100% por lo que ayer debía llenarse la plaza y sin embargo a duras penas se llegaba a los tres cuartos del aforo.

Y sin embargo era uno de los carteles más atractivos de toda la feria.

El cartel de los jóvenes que vienen por el relevo, los que deben estar muy pronto en el escalafón de matadores de toros.

Y esta vez no hubo motivos para el desánimo, todo lo contrario, vimos a tres toreros dentro de la más pura ortodoxia y además con personalidad y con ideas.

Posada de Maravillas vuelve a demostrar que sabe mezclar un toreo relajado y de seda con momentos de desgarro. En sus dos faenas intercaló naturales de lujo y derechazos rematadísimos con momemtos en los que crujía con desgarro, como dicen que toreaba su abuelo, Juan Posada. Y es que el nieto nos trae chispazos de modos de antes, con sabor a toreo antiguo. Le sobró esa vuelta al ruedo en el cuarto después de matar de un bajonazo y cuatro descabellos y también le sobra ese afán de gesticular sin venir a cuento. Pero nos sigue convenciendo.

Varea, el novillero que con más solidez presenta sus credenciales como la mejor apuesta de futuro en la fiesta de este momento, ha superado la adversidad de un lote deslucido, blando y descastado. Ha estado impecable en el toreo al natural, ¡vaya izquierda cara!, y sobre la mano derecha compone a la perfección para llevar el muletazo hasta el final. Por encima de ambos novillos no deja ya dudas de sus posibilidades de cara al futuro.

El peruano Roca Rey se empleó a fondo con el capote y lo hizo con variedad. Estuvo por debajo de la clase del tercer novillo pero muy por encima del sexto, al que le hizo mucho más de lo que era posible. Demostró que además de valor tiene cabeza y sin demagogias, tan frecuentes en los toreros sudamericanos, exprimió lo poco que ofrecía el animalito de El Parralejo y lo hizo con rotundidad. Ademas se fue detrás del acero como una fiera para dejar una estocada fulminante y cortar la oreja de la tarde.Pamplona, domingo 5 de julio de 2015. Novillos de El Parralejo, bien presentados y de juego desigual en conjunto. Extraordinario el cuarto. Posada de Maravillas, silencio y vuelta al ruedo tras aviso; Varea, vuelta al ruedo y ovación con saludos; Roca Rey, palmas y oreja con petición de la segunda. Entrada: Más de tres cuartos de plaza.