
El torero de Borox ha dejado la clínica alrededor de las 14 horas y lo ha hecho con buen aspecto, elegantemente vestido, con una camisa azul y un pantalón azul marino y acompañado de su apoderado y amigo Antonio Tejero.
Frente a un nutrido grupo de periodistas, el torero madrileño ha querido agradecer en primer luhar "el cariño recibido en los momentos más duros de mi vida y especialmente no tengo palabras para quien me salvó la vida que es don Máximo García Padrós y todo su equipo". Además, también ha mostrado su agradecimiento a todo el personal del hospital que le ha atendido durante los últimos días.
"Estoy contento a pesar de la crudeza que me ha tocado vivir -continuó David Mora- porque un percance así ha servido para demostrar la verdad y la autenticidad de mi profesión. He tenido la suerte de que fuera en la plaza de Madrid".
Frente a un nutrido grupo de periodistas, el torero madrileño ha querido agradecer en primer luhar "el cariño recibido en los momentos más duros de mi vida y especialmente no tengo palabras para quien me salvó la vida que es don Máximo García Padrós y todo su equipo". Además, también ha mostrado su agradecimiento a todo el personal del hospital que le ha atendido durante los últimos días.
"Estoy contento a pesar de la crudeza que me ha tocado vivir -continuó David Mora- porque un percance así ha servido para demostrar la verdad y la autenticidad de mi profesión. He tenido la suerte de que fuera en la plaza de Madrid".
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