Manuel Molés, que ha cumplido ya la provecta edad de 74 años, edad más que sobrepasada para una jubilación, se resiste a ello. Se resiste, porque este tipo de personajes a quien todos rinden pleitesía, cuando dejan su profesión, quedan abandonados a su suerte. Ejemplos que no voy a decir los tenemos. Y ya que él no se decide a hacerlo, son ambos diestros los que le quieren jubilar.
Manuel Molés manda en esto queramos o no y hay que reconocerle que a través de Canal Plus ha metido el mundo taurino en muchos ámbitos pues además, los medios humanos y técnicos de que dispone son excelentes; a esto acompaña que se rodea de profesionales que con más o menos locuacidad comentan sus experiencias y conocimientos taurinos.
Es extraño lo que pasa pues El Juli era hasta hace poco un de sus mejores “clientes” Morante siempre ha ido a su bola y no se le conoce “clientelismo”. Lo de José Tomás ya viene de lejos y es otro de los que no han tragado con Molés.
Esperemos la próxima presencia de los “rebeldes” en Las Ventas a ver qué pasa. La más cercana es el 4 de junio la corrida de La Beneficencia con El Juli. Que Manuel Molés necesita una jubilación por edad parece que sí. Pero parece razonable que quien le jubile sea su empresa, no los susodichos.
Sustitutos, además forjados por él , ya los tiene. Aunque repito, si por mi fuera, hace tiempo lo hubiera jubilado y no sólo por edad
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