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miércoles, 18 de febrero de 2015

EL COLMO

Morante no irá a Sevilla. 
Hasta cinco tardes le había ofrecido la empresa Pagés al de La Puebla  para que regresara a La Maestranza después del affaire del G5, del que sólo Manzanares se ha desmarcado, asegurando que estará en el Baratillo cuando llegue el sol de abril.
 La negativa de José Antonio a acudir a La Maestranza, por segundo año consecutivo, ha cogido con el pie cambiado a propios y extraños.
El propio Ramón Valencia afirmó  el pasado lunes que las negociaciones no iban por buen camino, a pesar del ofrecimiento de la empresa de cinco tardes para el de La Puebla en el Baratillo.  La realidad es que las circunstancias sí han cambiado, aunque tal vez no sea suficiente para un torero que pidió una disculpa pública por parte de la empresa y fue atendido en su demanda, además de tener su presencia en el ciclo en avanzado estado de negociación, con su presencia incluida el Domingo de Resurrección junto a Manzanares.
 Posiblemente Manzanares también haya sido presionado para que tampoco acuda a Sevilla por parte de sus compañeros ausentes.
De las cinco figuras del toreo que el año pasado vetaron a la empresa de la plaza de la Maestranza de Sevilla solo José María Manzanaresparece dispuesto a anunciarse en los carteles del abono de 2015.
Hay fuentes que afirman que el torero de Alicante ha recibido alguna sugerencia para que también se caiga de la Feria de Abril, algo a lo que Manzanares no accederá.

El torero de La Puebla del Río se ha limitado a hacer público un escueto comunicado en el que dice textualmente: "Por medio de la presente, y dirigiéndome a la afición de mi tierra no tengo más remedio que decirles, muy a mi pesar, que por segundo año consecutivo no torearé en Sevilla".
El asunto sorprende porque el propio torero anunció el pasado 15 de enero que su intención era "estar por el bien de la tauromaquia", si bien añadió: "Aunque, a veces, no es fácil decidir en una situación tan complicada, sé que a Sevilla no podemos dejarla sola. Mientras se mantenga el respeto, se le puede dar una oportunidad a esta empresa, siempre que las cosas como se merece Sevilla".
A pesar del silencio momentáneo de los empresarios, los rumores apuntan desde un profundo desacuerdo económico entre la empresa y las figuras hasta una premeditada estrategia para erosionar las relaciones entre los empresarios y la Real Maestranza, propietaria de la plaza.
Con la FIT al fondo maniobrando en la oscuridad....

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