MEDIO SIGLO DEL DEBUT EN HUELVA DE PALOMO LINARES
Parodiando a una conocida zarzuela, hay que reconocer que el
tiempo avanza que es una barbaridad. Y han transcurrido cincuenta años, medio
siglo, desde queSebastián Palomo Linares hiciera su presentación en la añeja
plaza de toros de Huelva. Fue el 19 de marzo de 1.965.
En aquella tarde se lidió una novillada del hierro de Eloy
Jiménez Trujillo, con reses terciadas y bien armadas, que fueron con facilidad
al engaño. El primero fue a donde quería; el segundo tuvo una embestida franca
y larga; el tercero también arrancó bien; el cuarto atacó con fuerzas como el
quinto y el sexto sin que aprovecharan su alegría.
Abrió plaza el sevillano José María Sussoni que movió con
gracia el capote y la muleta en los primeros pases pero el novillo, que iba con
facilidad al engaño, se empeñó en cerrarle espacio y se perdió la suavidad del
sevillano, por lo que decidió matar, algo que hizo con habilidad. En el cuarto
se desconfió pero, afortunadamente, lo mató pronto y fue aplaudido.
Como siempre, el triguereño Pablo Gómez Terrón estuvo
acompañado de muchos seguidores.
Brilló al torear con el capote a su primero en
el que ya expuso su valor; después, con la muleta, lo recibió por alto mientras
se liaba a su cintura a su oponente, acortando las distancias en cada pase. Fue
un toreo angustioso acogido con clamor por los tendidos, entregados al torero
local que, sin embargo, no tuvo fortuna a la hora de matar porque tras una
buena estocada, el animal se amorcilló y el puntillero no acertó, sonando un
aviso. La petición de trofeo fue muy grande y, al no concederlo la presidencia,
el triguereño dio una aclamada vuelta al ruedo.
En el quinto, volvió a
estirarse al torearlo por redondos con los que inició una faena aclamada por
todos y que mereció el premio de las dos orejas y las vueltas al ruedo que dio
para agradecer los aplausos del público a pesar de tener unos varetazos en la
axila y en la cadera.
Palomo Linares demostró que, pese a su juventud, estaba
muy toreado y así pudo superar las dificultades de su primero, que había
recibido demasiados capotazos. El jienense dominó a su oponente al que dobló
con coraje y conocimiento y, tras una estocada, dio la vuelta al ruedo tras una
fuerte petición de oreja. Volvió a lucirse al veroniquear al que cerró plaza y
en un quite por gaoneras. Con la muleta, lo toreó por redondos con un armonioso
juego de muñeca y volvió a enloquecer a los tendidos aunque en esta ocasión
falló con los aceros y no obtuvo trofeos.
En suma, fue una agradable tarde de toros en la que Gómez Terrón volvió a poner de manifiesto su valor y su calidad, llegando con
suma facilidad a los tendidos, obteniendo un nuevo triunfo ante una afición
enfervorizada y entregada al quehacer del triguereño.
También merece destacarse de la actuación del joven Palomo Linares que demostró poseer unos
amplios conocimientos de la lidia, su facilidad para llegar a los tendidos y el
fastuoso porvenir que tiene ante sí.
VICENTE PARRA ROLDÁN
No hay comentarios:
Publicar un comentario