FERIA DEL PILAR

Como ya es habitual, en el primer día del Pilar, se organizó la tradicional quedada de antitaurinos frente a la plaza de La Misericordia.

 Unos 150 manifestantes con los gritos de rigor contra la tauromaquia. 

Y dentro de la plaza doce mil aficionados. Queda consignado el dato.

Y los doce mil de dentro de la plaza lo pasaron pipa a pesar del espectáculo devaluado que se ofreció. La corrida impresentable de Cuvillo, un saldo de fin de temporada, su borreguez y su invalidez restan valor a los que hicieron los tres toreros.

Como protagonista principal se erigió Alejandro Talavante que derramó ingenio y pinceladas, desde los lances con el capote hasta los muletazos desiguales, con tantos enganchones como temple y belleza tuvieron otros, todo mezclado. Pero predominó la actitud muy torera del diestro, muy enganchado con los tendidos. A pesar del feo espadazo trasero le dieron dos orejas con las que abrió la puerta grande, una puerta excesiva. Mareó la perdiz con el inválido sexto. En el balance positivo de Talavante hay que consignar que aceptó la sustitución de Enrique Ponce a pesar de que el sábado está anunciado en un mano a mano con López Simón. Y es que en estos tiempos eso de que los toreros acepten sustituciones y se prodiguen es una rareza. Antes era lo normal

Lo más importante estuvo a cargo de Diego Urdiales con el segundo, manso y blando, al que entendió y midió en una faena que fue una lección de pureza y recursos. Esa oreja que cortó fue de peso. Si hacemos excepción del anovillado ejemplar que tuvo enfrente. El quinto no podía con el rabo y Udiales se empeñó en una labor tan estéril como voluntariosa.

Morante de la Puebla dibujó algún muletazo con su primero, blandísimo, y cuajó un quite hermoso por chicuelinas, de su mejor repertorio, al primer toro de Talavante. De lo demás no hay memoria, como no sea que bregó con el manso que salió en cuarto lugar y que a pesar de un bajonazo alevoso le ovacionaron. Como ha cambiado Zaragoza...

• Plaza de toros de La Misericordia. Domingo, 11 de octubre de 2015. Primera de feria. No hay billetes. Toros de Núñez del Cuvillo, desiguales de hechuras, remates y seriedades; muy bueno el 3º sin duración; humillador sin fuerza ni fondo el 1º; topador, remontado y con viaje a su aire por el izquierdo el 2º; basto y boyancón el 4º; derrengado el 5º; bondadoso y de escasa vida el 6º.
• Morante de la Puebla, de nazareno y oro. Dos pinchazos y media estocada (silencio). En el cuarto, estocada honda desprendida (saludos).
• Diego Urdiales, de rioja y oro. Estocada rinconera (oreja). En el quinto, estocada honda ladeada (saludos).
• Alejandro Talavante, de gris tórtola y oro. Estocada (dos orejas). En el sexto, media estocada pasada y tendida y varios descabellos (ovación de despedida). Salió a hombros.